Sócrates, recogiendo a Alcibíades de una de sus múltiples salidas nocturnas.
Alcibíades Clinias Escambónidas. Ya solo el nombre suena aburrido ¿eh? Pues este chico, tuvo una de las vidas mas apasionantes y controvertidas de Atenas en el siglo V a.c. (cuando Atenas molaba). Imaginaos a Bradd Pitt, pero con el pelo largo y rizado, educado en las mejores universidades del mundo, y con todo el dinero y poder político que una gran familia gobernante pueda aportar, y os haréis a la idea de quien era Alcibiades (no, no hay Angelinas por medio, ni colección de niños del tercer mundo ni nada parecido, eso no os lo imaginéis, que nos conocemos)
Alcibíades, como os iba contando, nace en el seno de una familia rica y poderosa de la Atenas clásica. Estaba emparentado con Pericles, y cuando quedó huérfano, este y Anfirón fueron sus tutores (Pericles y Anfirón = Amos). Ya desde adolescente, le encantaba llamar la atención, y paseaba por Atenas con un escudo dorado en el que aparecía grabada la cara de Eros (el dios de la atracción carnal, sexo, y demás actividades lúdicas, de las que él, por cierto, disfrutaba mucho). Ese escudo, que hacía juego con sus ricitos de príncipe azul y su cara de niño bueno, hacían que su fama de macho fornido fuese legendaria (si, hasta el mismo César quedaría como un jovenzuelo tímido e inexperto a su lado). Sócrates, su maestro, intenta llevarle por el buen camino, arrastrándole con frecuencia a altas horas de la madrugada de casas de mala fama (jamás comprendí ese eufemismo), pero, al final, no consiguió enderezarle, y eso que se decía que era su mejor discípulo. (si os gusta http://conefedefilosofia.blogspot.com.es/ , id y preguntarle al profesor Luigi como es la entrada triunfal de Alcibíades en «El banquete» de Platón, totalmente ebrio y rodeado de furcias.. la risión) Sigue leyendo